Aunque la cirugía laparoscópica es menos invasiva que la cirugía abierta tradicional, es importante seguir cuidadosamente las instrucciones de su médico para garantizar una recuperación exitosa. Después de la cirugía laparoscópica, puede esperar sentir algo de malestar abdominal, hinchazón y náuseas. Sin embargo, estos síntomas generalmente desaparecen en unos días. Durante las primeras semanas, deberá:
- Evitar actividades físicas extenuantes;
- Seguir una dieta ligera y saludable;
- Vigilar cuidadosamente los signos de posibles complicaciones, como fiebre, dolor intenso o sangrado excesivo.
Recuerde que cada persona es única y puede tener una experiencia de recuperación diferente después de la cirugía laparoscópica. Sin embargo, siguiendo las recomendaciones médicas, estará en el camino correcto para una recuperación rápida y exitosa.
Si está considerando someterse a una laparoscopia, programe su consulta en el Instituto de Cirugía sin Sangre. Cuidar de su salud es esencial y programar una consulta es el primer paso para tomar las decisiones correctas.