Los procedimientos de resección endoscópica de próstata (TURP) ofrecen muchas ventajas en comparación con otros procedimientos quirúrgicos para el tratamiento de hiperplasia benigna de próstata (BPH).
La BPH es la causa más común de síntomas urinarios en hombres mayores de 50 años y la resección endoscópica ofrece resultados positivos generalizados, con tasas de curación tan altas como el 95%.
Una de las principales ventajas de la resección endoscópica de la próstata es que la cirugía requiere un tiempo más corto para realizarse, comenzando y terminando en aproximadamente 30 minutos. Además, deja pequeñas incisiones quirúrgicas, lo que reduce el tiempo de recuperación.
La resección endoscópica de la próstata también ofrece una mejor función sexual en comparación con otros tratamientos, como la cirugía abierta. Esto significa que, a diferencia de la reposición hormonal, esta cirugía puede ayudar a preservar la función sexual de los hombres al mismo tiempo que reduce los síntomas, en lugar de simplemente aliviarlos.
Otras ventajas de la resección endoscópica de la próstata incluyen menos dolor y molestias postoperatorias, menos sangrado durante la cirugía y incisiones más cortas que permiten a los pacientes regresar a sus actividades normales más rápido.